La noche en que robé...

Cuando estaba en octavo básico (ufff..parece que fue hace un siglo) yo era fanático de INXS. Pelaba ene el cable y en más de alguna fiesta me juraba Michael Hutchence cantando con todas mis fuerzas.

Ese invierno, nuestras relaciones exteriores funcionaban de maravilla con las chicas de un colegio de monjas que quedaba muy cerca del mío, recuerdo más de algún pololeo agradable que surgió en aquella época. Por tanto, era usual que nos invitaran a todas las fiestas que hacían. 525 se codeaba en ese tiempo con 2 partners: El Chino Santtiz y El Sapo Fuentes. (sorry brother que diga el sobrenombre que tanto odias)

Llovía a cántaros. Con ese tipo de lluvia que tus viejos te huevean antes de salir diciéndote: abrígate bien cabro hueón !!!..más lo que hinchaste por la parca esa y ahora no te la pones...ese chaleco parece tela de cebolla y bla, bla, bla..

La casa era super enana y estaba en la calle que quedaba justo al costado del colegio. Cuando llegamos nos dimos cuenta que el nivel de pingüis era bajo..ojo que me refiero a la cantidad y no a la calidad...mentira..jajaja..la cosa es que muy de a poco empezaron a llegar más y la fiesta empezó a andar mejor...como olvidar aquellas añejas canciones de Technotronic, Soda Stereo, Roxette,etc..(al poner los grupos ya cacharon que edad tengo)

Pero para mí la música estaba re mala, así que como no era muy bailarín que digamos, me dirigí raudo al lugar donde estaba el equipo de música y me dispuse a ser Dj. No vayan a pensar que ponía CD´s...no pa´ ná...ponía esos típicos cassettes Maxell que adelantabai en clases con el lápiz BIC...

Durante un largo rato lo hice bien, tenía a toda la gente bailando y saltando, incluyendo a mis partners que se codeaban con pingüinas de chasquilla alta tipo codorniz. Pero todo cambio ante el grito de horror de la madre de la dueña de casa, había llovido tanto y la casa estaba bajo el nivel de la calle, por tanto, el agua empezó a entrar justo al living donde estábamos todos...ahí la fiesta se chacreó...se fue todo al carajo, los tipos saltaban en las pozas de agua, las minas se mojaban su ropa marca Cacao y 525 firme en su pega manteniendo el rating de la música sin importarle las inclemencias del tiempo...justo en ese momento aparecieron mis partners, mojados y muertos de la risa, porque a esa altura todos se habían caído más de alguna vez al piso...

La fiesta había mutado y en ese preciso momento casi como por arte de magia y con voces angelicales apareció el cassette de INXS en mis manos..junto a mí el ángel y el diablo..Chino y Sapo...¿cuánto le había rogado a mi vieja para que me lo comprara?..525 es tu oportunidad..¿lo hago o no lo hago?..mi papá siempre me dijo que en lo ajeno reina la desgracia..amigo mío...dijo Sapo...tu te llevas ese, yo el de The Doors y el Chino el de Roxette...me parece justo..-continuó- por tu excelente labor como Dj...me juré grabarlo y devolverlo, tirarlo por la puerta un tiempo después...esa noche llegué a mi casa con la convicción de que había hecho algo malo pero todo se me olvidó cuando escuché Bitters Tears..mi canción preferida..te juro pingüina que un día de estos te voy a devolver el cassette, siempre y cuando lo encuentre...

525.